Pensando en las experiencias recientes, me he puesto a reflexionar sobre la corriente del mundo que lucha incansablemente por arrastrarnos, y como nos descuidamos y al fin nos dejamos envolver en costumbres y hechos que van en contra de nuesto pensamiento y aún de la voluntad de Dios.
Es necesario tener una preparacion diaria de comunion con el Señor, o terminaremos sin distincion del resto de las personas, "El hombre de doble ánimo es inconsatante en todos sus caminos (San. 1:8)
No es una tarea fácil, tenemos nuestra humanidad en contra, y un mundo de pruebas que superar sin embargo Dios promete que resistir dará buenos frutos: "Sabiendo que la prueba de vuestra fé produce paciencia" (San. 1:3).
Ahora bien, las pruebas son una bendicion si se logra vencerlas son ofender a Dios, estos días he visto esto como una realidad, aunque fué un trago amargo, ahora que ya pasó, me dejó un aprendizaje, me dió gozo, seguridad y tranquilidad, a pesar de que el panorama no ha cambiado mucho.
No digo que fué cosa mía, él nos da el valor y desicion para hacer las cosas, cuan grande es Dios que junto a la prueba nos da tambien la salida, por ese gran amor que nos tiene, me dí cuenta que ser fiel no depende totalmente de mí sino de su gracia y ayuda. sin ella seguro que no resistía.
Ahora que estoy lejos de casa, he aprendido muchas lecciones, de mi relacion con Dios y tal vez él me trajo para que pudiera apreciar mejor sus cuidados y su proteccion."Mas a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan para bien" (Romanos 8:28). Estoy agradecida por toda esta tribulacion porque sé que él es capaz de convertir todo esto en bendicion para mi.
DIANA
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